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viernes, 31 de enero de 2014

Cintura de guitarra


¡Oh, anaranjado estallar de soles amanecidos
   que se rompen/
      en la luna dilatada de aquellos ojos!...
que trepan/
   las quebradas pedregosas
      de mi espíritu...

Duende íntimo que abraza
   suavemente/
      su cintura de guitarra...
y mi guitarra cela/
   hoy no canta/
      llora.

Oh, guitarra/ ciega/   ¡No puedes!...
¿No quieres acaso?

   ...Yo sí quiero
enhebrar en melodías
   la musa dulce de su amor.

¡Oh, bordonas y tristes cantarinas!
¡No decaigan hoy
   escoltas reticentes!
Como en aquellas noches de nostalgias
   ¡yo quiero aún, cuerdas,
      vuestro bálsamo sonoro!
¡No llores guitarra, sueña!
   ¡Sueña guitarra, sueña!

La opulencia del sentir
   engorda
      los latidos de estas notas.
¡Canta, guitarra, canta!
...No olvidan las manos de mi ser
   el pozo erótico de sus curvas
      donde aún
         ensamblo mi pasión.

...y duermen los párpados/
   al vibrar
      la cuerda oscura de mi voz
         porque sienten/
            revenidos timbres    y luces
               en los arpegios de su alma.

¡No llores guitarra, sueña!
¡Canta guitarra, canta!

Autor: Juan C. L. Rojas

viernes, 6 de noviembre de 2009

Nace Eros


Cuando estás conmigo
    nace Eros.
Espolea el desasosiego
      en el esplendor fervoroso de la carne.

Deshojo las magnolias de tu piel.

Atrapo en el aire el zumo fugaz de lo furtivo
     mientras galopan desbocadas
         las tibias olas de mis venas.

Estalla el regocijo/    muere el corazón...
¡Qué bueno es morir
     en la ternura de tus brazos!

Cuando estoy contigo nace Eros/
El espíritu se anuda en el amor
     y bebo estrellas que titilan en mi cuerpo.

Debes marcharte      lo comprendo.
Pueril anhelo el mío...
     ¡Detener golondrinas!

No importa dónde
     en cualquier lejanía
         te visitará mi duende intrépido/
con la antorcha ansiosa del amor.

No importa la noche que te cubra/
     sentirás mis manos deslizarse
         en las cálidas playas del pubis.

Te rozarán mis labios/
     subiendo la curva placentera de tu pecho/
         y en tus oídos la declamación del cielo
             en el feliz delirio de tus sueños.

Estaré en ti/
     encendiendo lo perenne
de que vive el Universo.

Autor: Juan Carlos Luis Rojas

Gracias a todos por vuestra generosidad en participar. Un abrazo.