Estremecido/
Sobre tenue alfombra
de cálidas aguas/
...cuando libas en mi cuerpo
las profundidades de la miel/
...cuando en tu mimar subrepticio
me rozan/
de tu fuego las sutiles alas/
...cuando entibias tus manos en las mías
que significa
protegerme del mundo en las tuyas.
¡Arde el corazón
en esta franja del espacio
donde detengo a las estrellas!
Siembras de gozo
mi rostro adormilado.
Reparto en el resto de las horas
los dulces frutos del hechizo.
También ganan las estrellas
/que ahora sí/
me devuelven la sonrisa.
Autor: Juan C. L. Rojas